Love is in the air...

Nuevas aventuras de nuestros chicos por esos Campeonatos y Torneos de Dios.
José Ignacio Fernández y Nacho Chaves nos ofrecen su visión de un nuevo fin de semana en Valladolid. En éste caso, el evento era el Torneo Nacional y Campeonato de España de categoría Infantil. Ahí es nada.

Lo primero de todo, reportar el elenco, de lo más heterogeneo:
Los dos citados que veníamos de Madrid, los pucelanos Felix Villegas, Fernando Raposo y el regional Héctor Maestro, Iñaki Vergara, Luis Santos y José Miguel Cuñado, por lo de la proximidad geográfica (cómo es de Zamora...el hecho de que viva en La Coruña es meramente anecdótico).
El equipo madrileño, al igual que hace quince días partía de la estación de Atocha después de recoger al señor Director de la Escuela a su llegada de Sevilla. Esta vez pudo conectar sin problemas el "blutú". El viaje transcurrió sin incidentes dignos de mención, salvo reseñar, como llevo años diciendo, que se tarda menos yendo por Olmedo que por Tordesillas...y eso a pesar de la conducción de Nacho Chaves, que parecía Morgan Freeman Paseando a Miss Daisy; eso sí, stress, lo que se dice stress, cero.
Mientras vamos de viaje, la primera del fin de semana. Iñaki Vergara que llama a preguntar que por qué no duerme con Luis Santos, que le habían puesto con José Miguel Cuñado. Y claro, que ellos no se ven mucho, que les gustaría estar juntitos...en fin, un poquito de Brokeback Mountain.

Sin más, a las 21 horas estábamos, otro viernes, en el NH Valladolid. Dejar la bolsa y abajo a la preceptiva reunión.
Ya en la reunión se vio que el personal estaba poco proactivo. Nada más empezar:

-Pardal: "En este e-mail que os he enviado..."
-Raposo: "Yo no he recibido nada".
-Pardal: "¿Has abierto el correo?"
-R.: "Sí, y no he recibido nada"
-P.: "¿Pero cuando lo has abierto?"
-R.: "Que no he recibido nada".
-Pardal, al resto: "¿Los demás lo habeis recibido?"
-Todos: "sí..."
-R: "Pues yo no he recibido nada"

Y así podríamos seguir hasta hoy si no cortamos el tema. Y empiezan a sonar los móviles...y a acumularse las multas, claro.
Y Luis no estando de acuerdo con las reglas...que son las que están escritas.
Vamos, que la gente sabe lo que es el Rugby Gradual porque ha oído hablar de ello, pero leerlo, lo que se dice leerlo...en fin.

Acabada la reunión, una vueltecita para cenar. Y Mikel que se empeña en ir a un sitio, "que está aquí al lado, joder, que a mí me ha llevado Txerra". Y venga a dar vueltas por la Plaza Mayor...hasta que a Nacho se le ocurre la gran idea: preguntar. Oye, ¿sabéis dónde está "La Sepia". Y sabían. Y lo encontramos. Y la verdad es que se comía bien. Muy rica la sepia y el pulpo; flojitas las bravas.
Y el Cebralimp. Sólo a Juanma se le ocurre mancharse. Y Pardal le dice que no se preocupe, que le va a poner un poco de Cebralimp. Y la mancha se fue...con la mitad de la camiseta.
Acabada la cena, vuelta al hotel, que a las siete había que levantarse.
Sábado por la mañana, madrugón, lluvia y vientecillo fresco. A desayunar como los pavos, porque el personal del hotel éste fin de semana no estaba por la labor de madrugar y abrir antes el restaurante. Y a las 8'30 en los campos, bajo una llovizna fresca. Reparto de designaciones y campos y a la faena.
Y empieza el "chou". Fernando inaugura el Torneo en el campo tres entre el alborozo del personal. Primer empate del Torneo y a desempatar a palos. Cinco lagartos a la buchaca. Pero tranquilos, que había para todos.
Héctor se significó como creador de las nuevas posiciones del arbitraje. Para los anales quedará "el misionero", mezcla de postura y coreografía de Eva Nasarre.
Véase: entra un agrupamiento en zona de marca y:
1-Flexión de rodillas
2-Una rodilla en tierra
3-Las dos rodillas en tierra
4-Mano derecha al suelo
5-Mano izquierda al suelo
6-Flexión de brazos
7-Pecho al suelo

Total: el misionero. Entre las lágrimas de risa de Fernando y mías.

Mientras se sucedían los eventos cumplo mi tercer partido y me autorizan a retirarme a descansar, que luego perpetraba en la superchampionlig. Fernando y yo organizamos mientras la comida para todos en Castronuevo. Croquetas como para una boda.
Luis, Iñaki y yo, con Mikel, nos vamos los primeros a que nos dieran algo de comer, no fuera que luego nos pesaran las piernas, mientras el resto del personal iba terminando.
Debieron salir del restaurante a las 17'45, lo justo para no perderse los himnos del Vacceos-Korsarioak.
Al acabar ésto, un ratito (corto) de tercer tiempo en La Central y camino de Mucientes, a la preceptiva cena.
Cómo daría para escribir un libro, invito a los presentes a que añadan sus comentarios en éste blog, puesto que al no disponer de grabadora, sería incapaz de reproducir fielmente todas las paridas que fuimos capaces de decir en un rato. Lo cierto es que cenamos (mucho) bien y nos reímos más. Si no fuera por éstos momentos...

Vuelta de nuevo a Valladolid y recogida, que el domingo, otra vez arriba a las 7 de la mañana.

De éste día, poco puedo escribir, porque Fernando, Félix y yo estuvimos en el campo 2 y apenas vi nada...ni a nadie.
Tan sólo reseñar que Bonnie (Iñaki) pitó la final del Torneo y Clyde (Luis) la del Campeonato. Lobezno (Juanma) tendrá que esperar mejor ocasión para pillar una final. Por cierto, que a éste paso vamos a montar un grupo de superhéroes tipo Los Vengadores o algo así, porque también fue para nota el momento Spiderman de Luis, subido a un banco del vestuario y pegado a la pared.
Digno de mención es que Iñaki y Luis ¡no se lesionaron!. José Miguel amagó con ello, pero mantuvo el tipo.

Y así, con la victoria de Santboi en el Campeonato finalizó un nuevo fin de semana pletórico de rugby. Cervecita rapidísima y de vuelta al hogar. Cada uno al suyo. Iñaki y Luis se despidieron muy efusivamente hasta la temporada que viene. Y nosotros de regreso a Madrid. La hipervelocidad de Nacho no me impidió quedarme "traspuesto" en el asiento trasero, así que apenas tengo noción del viaje de vuelta.
Puedo confirmar que Pardal no perdió el AVE, eso sí.

Y esto es todo, amigos.