De Dioses y Monstruos

Tal y como comentábamos en entrada anterior, vamos a tratar ahora sobre la labor de los árbitros asistentes en el partido Australia-Nueva Zelanda correspondiente a la Bledisloe Cup de la pasada semana.
Dirigido por Craig Joubert, los árbitros asistentes para el encuentro eran los también sudafricanos Jonathan Kaplan; quizá uno de los mejores de la última década y que tuvo la mala suerte en la última Copa del Mundo de que Sudáfrica llegara a la final, y Cobus Wessels.
Como ya hemos contando, en el referido encuentro, el australiano (bueno, sudafricano pero que juega por Australia) Drew Mitchell vio dos tarjetas amarillas que le supusieron la expulsión definitiva en el comienzo de la segunda parte del encuentro (además de dos semanas de suspensión). La segunda y definitiva fue consecuencia de una serie de acciones durante el encuentro que ya hemos relatado pero la primera proviene de una "llamada" que Cobus Wessels le hace a Craig Joubert sobre un "late and dangerous tackle" realizado por Drew Mitchell sobre Richie McCaw. No he conseguido ver ni en directo ni en repetición alguna, ni brujuleando por Internet la susodicha acción pero... la bromita le ha costado a Wessels el ser, como diría nuestro compañero Gabriel Casero: "relegué". Así es, debido a su "poor performance" durante el encuentro, Cobus Wessels fue sustituido en su designación para el partido Nueva Zelanda-Australia del Tri Nations, encuentro de vuelta de la Bledisloe Cup. Paddy O'Brian, que está últimamente de un locuaz que te cagas, explica los motivos de la "resignación" del sudafricano.
Y... por qué no. Entiendo la postura: si la cagas, te la juegas. Lo que pasa es que así debería ser con todos y me da la sensación de que Cobus Wessels paga los platos rotos del berrinche de los wallabies. Porque no se vayan a creer que aquí, por muy profesionales que sean, no protesta nadie. Muy al contrario; Peter de Villiers, seleccionador sudafricano, no ha parado de rajar de la actuación de los árbitros (irlandeses todos, para más señas) en su periplo por Oceanía. Australia estaba encantada mientras no ha perdido (de los All Black ni hablamos; Graham Henry ha dicho que Allain Rolland es el mejor árbitro del mundo, nada menos). Pero llega Australia y se come un baño en casita y, ale, a largar de los árbitros. Y alguien se tiene que comer el marrón.
Y estoy de acuerdo, sin verlo, que tal vez la decisión de Wessels sea mala. Pero la culpa de la expulsión definitiva de Mitchell no es ni de Wessels ni de Joubert, es de los propios jugadores. Un equipo como el australiano no puede sufrir dos sanciones de 10 metros más en un encuentro de ésta categoría y más estando de por medio... ¡su capitán!. Así que, toda la cadena de acontecimientos que se inician, sí, con esa primera tarjeta amarilla, desemboca en la expulsión definitiva. Pero mal hacen los australianos si buscan el arbitraje o una expulsión como excusa porque su partido es para enmarcar... pero por lo mediocre. Deberían, primero, hacerse mirar lo de su tercera línea; sonrojante el partidito de Pocock, quien salvo un par de recuperaciones lo único que hace es marcar músculo y sin comentarios el de su número 8, Brown, que placa menos que yo, que ya es decir. Lo de su línea de tres cuartos, otrora infranqueable es para la risa en defensa y en ataque todavía están mirando a la banda, a ver si reaparece Stirling Mortlock.
En cualquier caso y volviendo al tema de los árbitros asistentes y para los desconocedores que a veces nos leen, hay que recordar cuales son las funciones de los mismos. La IRB las marca claramente en el Reglamento de Juego y son, como yo digo, las referentes "al palo": marcar cuando y donde se produce un lateral y quien saca; controlar las transformaciones a palos de los ensayos y golpes de castigo e informar al árbitro de las posible acciones de antijuego. Al margen de eso, la IRB da libertad a los árbitros para que concedan más "atribuciones" a los árbitros asistentes. Y, de hecho, así ocurre también en éste partido. Wessels, además de indicarle el supuesto antijuego de Mitchell a Joubert, también le señala un lanzamiento parcial de lateral (con el que, por cierto, también se mete O'Brian) así como un "offside"(que se oye claramente en la televisión) de Brad Thorne a cinco metros de marca. También Kaplan interviene en el encuentro y no muy bien, para mi gusto. Bien entrada la segunda parte y tras un placaje -que Joubert ha visto- continúa el juego y Kaplan, bandera en ristre, llama a Joubert y le dice que "dangerous tackle" entre dos jugadores de negro pero que "no he visto el número". Un campeón, Kaplan. El placaje se produce entre el número 18 All Black que, sí, levanta del suelo a un australiano... pero sin que en ningún momento sus piernas estén por encima de sus hombros. Y... le placa. Es decir, le agarra y con él agarrado caen los dos al suelo, juntitos. Richie McCaw, simplemente, pasaba por allí. En mi opinión, "poor performance" de Kaplan en ésta acción. Eso sí, Joubert le hace caso y llama a McCaw y le dice: "mira Ricky, que no hemos visto el número, pero que dice Jonno que placaje peligroso y que tengáis más cuidado, que lo dejamos en golpe de castigo". McCaw preocupado, cuando ya les iban metiendo más de cuarenta a los wallabies. Eso sí, la diferencia entre Kaplan y Wessels está clara, ¿no?
En fin, que la próxima vez que Cobus Wessels vaya de árbitro asistente, ya sabéis donde se va a meter el palo.

1 comentario:

pequeñin dijo...

En este video se puede ver todas las fases del partido y de la gestión Joubert, incluida la primera tarjeta amarilla de Mitchell.
http://www.youtube.com/watch?v=QBnpliFRanI&feature=related
(si no sale a la primera, se llama The Drew Mitchell red card broken down)