En peligro de extinción

Dedicado, con mucho cariño, a Julio Souto.

No se si lo sabéis, pero los primeras líneas y más concretamente los pilieres, esos seres privilegiados, situados en lo más alto de la cadena alimenticia, sin predadores naturales, se encuentran en peligro de extinción.
Viene ésto al caso porque éste pasado fin de semana, tres equipos senior de las ligas madrileñas han estado a punto de quedarse sin jugar... por carencia de jugadores debidamente capacitados para jugar en la primera línea. En dos de los casos, los equipos se presentaron con cuatro primeras líneas, pero en el otro eran tan solo dos. Milagrosamente, al "enterarse" de que no se empezaría el partido si no eran cinco, aparecieron otros tres. Como el milagro de los panes y los peces vamos.
Hay un aspecto que hay que matizar y es que, en las competiciones madrileñas es necesario presentar CINCO primeras líneas en cualquier caso. Vamos, aunque el equipo se presente sólo con once jugadores, cinco de ellos deben ser primeras líneas. Esto es debido a que, aunque el Reglamento de Juego dispone otra cosa, el Reglamento de Partidos y Competiciones de la FRM lo regula así. Desde hace varias temporadas el Comité de Arbitros viene diciendo que ésta contradicción es ridícula y que debería modificarse pero... sigue vigente.
Por supuesto, es absurdo que un equipo que se presente con 15 jugadores tenga que tener cinco primeras líneas. Pero, hecha ésta salvedad, resulta increíble que un equipo sea capaz de "inventarse" uno, dos, o hasta tres primeras líneas para presentarse a un partido. Con el riesgo que eso conlleva. Porque uno de ellos, fijo que va a ser titular. Y puedo entender que un jugador se avenga a jugar de lo que sea pero me parece alucinante que delegados y entrenadores sean capaces de arriesgar la integridad física de sus jugadores. Y mal está que ésto ocurra en categoría senior donde por lo menos, los jugadores son mayores de edad y asumen sus propios riesgos. No, lo malo de ésto es que ocurre una semana sí y otra también en categorías sub 19. ¿De verdad tiene que pasar algo para que alguien se de cuenta de que ésto no puede ser?; ¿no será preferible perder un partido por incomparecencia que tener que lamentar toda la vida un daño irreparable?; ¿de verdad que a nadie se la va a ocurrir presentar una propuesta para modificar el Reglamento?.

Mientras tanto, larga vida y salud para los que cada fin de semana se juegan el tipo en la primera línea.

3 comentarios:

Alfonso dijo...

Lo más gracioso es que la obligatorieded de los 5 primeras líneas viene de que el Reglamento de Partidos y Competiciones de la FRM se copió casi literalmente del de la FER.

Así que encima arrastramos una norma que seguro que casi nadie defiende.

Anónimo dijo...

No me queda muy claro qué es lo que os parece mal... la insensatez de algunos equipos que "fuerzan" a jugadores no suficientemente preparados a jugar en la primera línea, o la obligación que tenemos en Madrid de presentar 5 al menos.

El rugby sin melée no es rugby y hay que hacer lo posible para que, salvo concatenación de desgracias, se siga jugando con melée normal...

Sé que no es lo mismo por el tema seguridad, pero, ¿alguién se imagina en un partido de basket eliminar los tiros de 3ptos porque se han quedado sin tiradores solventes?

José Ignacio dijo...

Las dos cosas son una insensatez. La más grave, sin duda, la de poner a jugar a gente no preparada en una posición específica.
Por encima de cualquier consideración "filosófica" debe imperar la seguridad de los jugadores.
Después de eso, estamos de acuerdo en que debe intentar jugarse con melés "de verdad".
Pero eso no quita que la norma sea ridícula. El Reglamento de Juego especifica cuando debe haber 5 jugadores y, desde luego, no lo exige en el caso de que se presenten 15... o menos. Resulta, si no insensato, ridículo, que un equipo se presente con 11 jugadores pero que para empezar el partido, cinco de ellos tengan que ser primeras líneas. Hombre, casi seguro que ese partido no se va a jugar... o que al menos dos de los primeras líneas marcados han jugado menos en la melé que Shane Williams.